martes, 27 de agosto de 2013

Keily y Daisy: Escribe Keily

Bueno, menos mal que practico karate, si no ya estaría echa unos zorros.
Por cierto hablando de zorros en este capitulo los zorros son los que me salvaron la vida y odio que me salven la vida, debería salvarmela ¡¡¡yo!!!.
-Idiotas insolentes, no me volváis a molestar, vamos Diablo, ya me están hartando estos niños.- me fui a mi casa.
-Como se ha atrevido esa niñata a llamarme niño- dijo el del pelo negro.
-Pues no está mal como lucha- dijo el pelirrojo.
-Es muy guapa- dijo el rubio
-¡¡¡Rayo!!!- dijeron los otros dos.
Yo estaba escondida en un árbol, porque algo en ellos me llamo la antencion:
-Hey, chicos, de donde venís- dije
-Y a ti que te importa-dijo el del pelo negro
-Pues mucho- bajé del árbol- no venís mucho por aquí ¿verdad?
-Pues...
-Seguro que os a mandado el renacuajo de Cody ¿no es cierto?
-Eres muy curiosa- dijo el pelirrojo- si nos a mandado él
-¿Porque le llamas renacuajo?- dijo el rubio
-Tu no te enteras de nada, él es más pequeño que yo
-Como te llamas, niña
-Keila, pero podéis llamarme Keily
-Yo me llamo Rayo- dijo el rubio
-Yo Fuego- dijo el pelirrojo
-Y yo Destrucción- dijo el del pelo negro
-Nombres muy extraños- dije
-Es que no tienes amigos- dijo Fuego
-Solo una y se llama Daisy
-Eres rara, te lo habían dicho alguna vez- preguntó Destrucción, pero yo ya me había ido.
Resonó mi voz en el Bosque:
-Muchas...
-Me da muchos escalofríos esa niña- dijo Rayo
-Por eso nos cae bien- dijo Fuego
-¿Enserio?- dijo otra vez Rayo
Fui corriendo al pueblo, ya era de noche, llamé a la puerta:
-Quien es- sonó desde dentro
-Soy yo Daisy
-Daisy es tu amiga Keila
-Ya voy mamá
Abrieron la puerta y entre.
-Daisy, te acuerdas de los niños que me atacaron
-Si
-Raros igual que yo
-No me lo puedo creer
-Si y creo que nos hemos echo amigos
-Imposible
-Y otra cosa, se como se llaman
-Como
-El pelirrojo Fuego, el rubio Rayo y el pelinegro Destrucción
Después de hablar de ello me fui a mi casa y me acosté.
Ya era por la mañana y como siempre me desperté muy temprano.
Fui a la cocina a coger el desayuno y lo metí en mi mochila negra con calaveras.
Salí de casa y me dirigía al arroyo donde me encontré ha los chicos y esperando volver ha verlos.
También me traje un libro y a Diablo:
-Diablo, ¿quieres un poco de pan con mermelada?
-Uhuh...
"Seguro que es no" me dije
-¿Y quieres esta culebra?
-¡¡Uhuh!!
-Toma...
Yo estaba comiendo pan con mermelada y queso fresco, un batido de chocolate y dos galletas.
-Bueno, Diablo, vamos a leer el libro




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